Es muy común confundir ética y moral, pero, ¿Realmente sabes cuál es la diferencia entre estos dos conceptos?
En nuestra vida diaria, todos los seres humanos tenemos que enfrentarnos a infinidad de problemas. Para resolverlos razonamos, recabando previamente información de los distintos saberes y las distintas ciencias que componen el conocimiento humano.
La ética se relaciona con el estudio de la moral y de la acción humana. El concepto proviene del término griego ethikos, que significa “carácter”. Una sentencia ética es una declaración moral que elabora afirmaciones y define lo que es bueno, malo, obligatorio, permitido, etc. en lo referente a una acción o a una decisión.
Existe una concepción tradicional que reduce a la ética a un simple capítulo de la filosofía, en la mayoría de los casos especulativa. Esto es aplicable a un tipo determinado de ética – la normativista – que ve su tarea fundamental en hacer recomendaciones y formular una serie de normas y prescripciones morales; pero dicha objeción no alcanza a la teoría ética, que trata de explicar la naturaleza, fundamentos y condiciones de la moral, poniéndola en relación de las necesidades sociales de los hombres.